El arte del diseño y el vanguardismo en el hogar está ganando protagonismo. Los ciudadanos se preocupan ahora más por la calidad de vida en la vida en casa y la tendencia apunta a la búsqueda de espacios abiertos y modernos, en los que se combina modernidad y sostenibilidad que siguen una nueva forma de vida. La iluminación del jardín y su conexión con la fachada, el contacto con la naturaleza o los aparatos inteligentes que pueden ser utilizados mediante un teléfono móvil son las particularidades que la caracterizan.
Los jardines y las terrazas han aumentado su valoración entre los ciudadanos, que se alejan de los pisos pequeños para convivir en zonas más abiertas y que dan pie a la imaginación y la creatividad. En ese sentido, la iluminación juega un papel muy importante. La tecnología LED de bajo consumo y el recurso a la energía solar predominan entre las decisiones. La mayor cantidad lumínica y la reducción en la tarifa de la luz son los motivos que llevan a este modelo, sin olvidar el importante componente ecológico. Si bien una instalación solar para el hogar requiere de una importante inversión económica y la infraestructura correspondiente, las luces de jardín ofrecen más flexibilidad, pues hay modelos sencillos que se cargan durante el día y se iluminan cuando llega la noche. Lámparas con sensor, bolas y guirnaldas solares son los productos más populares en esta gama. Se colocan en puntos estratégicos del jardín o la terraza, y aportan sostenibilidad y un gasto económico nulo, más allá del coste inicial. La moda en la iluminación de exterior también busca las lámparas decorativas que aportan una solución bonita y estable. Además, se adaptan a una amplia gama de colores y estilos.
Luces inteligentes y conectadas con las plantas
La inteligencia es otra de las características que define la tendencia actual en el diseño y la iluminación de jardines y terrazas. Se buscan productos que puedan ser manejados desde un teléfono móvil, a través de aplicaciones que funcionan pese a que los propietarios se encuentren a cientos de kilómetros del hogar. Son bombillas ‘smart’ que tienen conexión wifi y reciben las indicaciones por medio de una app. Si, por ejemplo, tenemos una visita y nosotros todavía no hemos llegado a casa, se pueden encender, desde el Smartphone, las luces del camino de la entrada para que los invitados detecten rápidamente el sitio. Es una posibilidad de entre las múltiples que ofrece la tecnología inteligente.
Entre los objetivos que persigue la industria de la iluminación exterior está el de conectar rápida y eficazmente con las plantas. Se comercializan focos que se instalan fácilmente en los jardines, sin que la propia instalación ni la luz dañe a las plantas. Les puede generar, incluso, una aportación lumínica extra que les permita seguir nutriéndose durante la noche. La combinación de todos estos factores genera un espacio ideal para disfrutar y convivir en unas condiciones óptimas, alejadas del ruido y donde la iluminación, la tecnología y la naturaleza entran en una perfecta conexión.
