La vuelta al cole, a la universidad, retomar las oposiciones o trabajar desde casa. Son muchas las personas que tienen un rincón en casa destinado al estudio o al trabajo ¿y cuál es uno de los aspectos fundamentales para ser más eficiente? Que tu espacio de trabajo esté limpio y ordenado. Y no solo para ser más productivo, sino para que tu mente también esté organizada.
En este post te vamos a dejar algunos consejos para que tu escritorio esté impecable y puedas desarrollar así tu trabajo de una forma eficiente, sin distracciones y con buen humor.
Quédate con lo verdaderamente importante
Es necesario deshacerse de aquellas cosas que no se utilicen, como bolis que no pinten, material roto o que no te guste. Al final, acabamos llenando nuestro escritorio de cosas inútiles que no utilizamos para nada y que se acaban convirtiendo en una distracción.
Es importante colocar el ordenador o herramienta de trabajo en un lugar central, privilegiado, y acomodar el resto del escritorio en torno a él. No debemos dejar que aquello que no utilizamos forme parte de nuestro entorno de trabajo cuando estamos tratando de ser productivos.
Archiva tus papeles
¡Olvídate del papeleo! No empieces a acumular papeles y ordena todo aquello que tiende a amontonarse. Deshazte de aquello que no te sirva y archiva aquello que sí sea importante.
Siempre es recomendable hacerse con uno o varios archivadores para poder organizar todos nuestros papeles. Puedes utilizar algún sistema que te permita localizarlos fácil y rápidamente, de manera que siempre puedas tener a mano la información que necesites utilizar. Esto te ayudará a optimizar tiempo y espacio.
Destina un espacio para cada cosa
Una vez que te has deshecho de todo aquello inútil o que no utilizas ni necesitas, es el momento de ordenar lo que ya tenemos. Puedes optar por cajas, cajones o clasificadores para colocar en ellos las cosas de las que dispongas de una manera más organizada y puedas encontrarlas de un solo vistazo, como pueden ser bolis, blocs de notas, material de oficina, etc.
Por otro lado, ten el cableado que se encuentra bajo tu escritorio bajo control. Puedes añadir etiquetas a los cables para distinguirlos y tenerlos organizados.
Decóralo a tu gusto y ponlo bonito
Añadir detalles y elementos decorativos a todo color es una muy buena opción para que tengas buen estado de ánimo a la hora de desempeñar tu labor. Añade bolis de colores, un flexo que te guste, plantas y flores, y material que vaya a conjunto. Con esto será imposible no trabajar con una sonrisa.
Aprovecha las paredes
Puedes optar por un cuadro, un mural con ilustraciones, un panel de corcho en el que pegar anotaciones, fotos, una frase motivadora, etc. En definitiva, utilizar la pared para colocar algo que te encante y que te motive en tu día a día, para que te alegre la vista cuando levantes la cabeza.
No solo ordenes, ¡también limpia!
Mantener tu espacio de trabajo ordenado y con todo clasificado no es suficiente, también es necesario limpiarlo. No necesitas mucho tiempo ni esfuerzo, ni tampoco muchos productos. Basta con que te hagas con un paño, un spray, alcohol o toallitas húmedas y limpiar de vez en cuando el escritorio.