A la hora de amueblar y decorar una casa pueden surgir impedimentos como huecos demasiados estrechos para cualquier mueble, habitaciones con formas extrañas, techos bajos… Uno de los elementos arquitectónicos que más problemas generan son las columnas, especialmente aquellas que están situadas en mitad de una estancia.
Las columnas no solo dificultan la colocación de los muebles, sino que pueden tapar la vista y resultan antiestéticas, lo que provoca quebraderos de cabeza a la hora de decidir la decoración. El truco para disimular las columnas y sacarles partido es integrarlas en la decoración. Te damos diez ideas para conseguirlo.
- Conviértela en un mueble divisorio: si una columna está en medio del salón se puede construir un mueble a su alrededor con estanterías y cajones para guardar cosas o para colgar la televisión. Si el mueble se hace los suficientemente alto y ancho puede servir para separar ambientes (sala de estar y comedor, cocina y comedor…).
- Añádele una estantería: una opción similar a la anterior es colocar al lado de la columna una estantería estrecha que llegue hasta el techo. De esta forma se aprovechará el espacio y el pilar estará disimulado con los libros. Si hay dos columnas en paralelo se pueden colocar unas baldas entre ellas para crear la estantería.
- Crea una ventana: si la columna no está demasiado lejos de una pared se puede unir a ella con un muro a media altura. De esta manera también servirá para separar ambientes. Otra forma de separar visualmente dos zonas es colocando columnas paralelas a la original. El conjunto de columnas marcará una división entre zonas pero sin cerrarlas completamente.
- Escóndela en un muro: si la columna está en mitad de un gran espacio abierto y preferimos estancias más pequeñas, se puede hacer un muro que atraviese el espacio y encubra la columna, consiguiendo así dos habitaciones separadas.
- Intégrala en la isla: si la columna está en una cocina espaciosa coloca la isla alrededor. Para ello será necesario encargar muebles a medida que adapten su forma al espacio ocupado por la columna. Si no quieres que la columna esté en el centro de la isla, también se puede dejar en un lateral de la misma. Lo mismo se puede hacer con una mesa o barra para comer.
- Decórala para que destaque: si no hay forma de aprovechar la columna para otro fin, se puede decorar de forma especial para que se convierta en un elemento destacado de la habitación. Píntala de otro color, añádele pequeños azulejos, cúbrela con madera…
- Conviértela en una pizarra: en lugar de pintarla del mismo color que el resto de las paredes, hazlo con pintura de pizarra. De esta manera la columna servirá para dejar anotaciones y hacer la lista de la compra o para que los pequeños desarrollen su creatividad.
- Cúbrela con pósteres: forra todo el largo de la columna con pósteres o láminas para crear un expositor improvisado. También se pueden colgar fotografías para crear un álbum familiar a la vista de todos.
- Añade un espejo que ocupe todo el alto de la columna: el espejo reflejará la luz y hará que la estancia parezca más grande. En un dormitorio puede ser útil para arreglarse.
- Iguala la pared: si la columna sobresale de la pared y necesitamos colocar un mueble (p.ej. un sofá) que ocupa todo el ancho de la habitación, lo mejor es igualar la pared al ras de la columna, haciendo que esta desaparezca. Para ello habrá que colocar paneles de pladur, DM… El principal inconveniente de esta solución es que se pierde espacio en la habitación.