A la hora de amueblar y decorar un interior hay un factor clave que hay que tener en cuenta: la combinación de colores. Una adecuada combinación no consiste simplemente en seleccionar los muebles de una misma colección o tono en madera, sino que deben armonizar todos los elementos visibles de la habitación: suelo, paredes, muebles, piezas de decoración… Para facilitar la combinación de colores existen ciertas reglas que se pueden seguir.
Monocromatismo
Apostar por un único color es la forma más sencilla de decorar una habitación. Elegir un solo color no significa que todos los elementos de la habitación tengan que tener exactamente ese tono, sino que se pueden elegir diferentes intensidades para las cortinas, alfombras, jarrones… Lo ideal es combinarlo después con blanco o tonalidades neutras.
Colores neutros
Los colores neutros encajan perfectamente entre sí, por lo que se pueden incluir varios en una misma habitación. Por ejemplo, se puede decorar un mismo espacio con gris y beige, blanco y gris, distintas tonalidades de gris… Los colores neutros dan como resultado atmósferas planas y relajantes que pueden servir de base para añadir algún color más chillón. Por ejemplo, introducir un sofá naranja en una habitación de tonos grises romperá la monotonía pero sin sobrecargar el ambiente.
Reglas basadas en el círculo cromático
A la hora de combinar colores, un truco infalible es consultar la rueda cromática. La combinación de los colores siguiendo la rueda puede ser:
- Por analogía: consiste en unir colores que estén colocados de forma adyacente en la rueda. Esta combinación crea armonía y una decoración muy atractiva. Un ejemplo de combinación por analogía sería escoger azul y morado.
- Por contraste: la armonía por contraste se consigue al escoger los colores situados en lados opuestos de la rueda como, por ejemplo, azul y naranja. Esta combinación aporta vitalidad y llama la atención.
Regla del 60/30/10
Consiste en elegir tres colores para que ocupen la habitación en proporción 60/30/10. El primer color será el dominante y teñirá el 60% del espacio. Un segundo color ocupará el 30% de la habitación y servirá como contraste. El tercero estará presente en un 10% y servirá como estallido aislado. De esta manera la habitación tendrá un aspecto equilibrado y armonioso. Eso sí, a la hora de seleccionar los tres tonos habrá que tener en cuenta cuáles combinan mejor.
Otros consejos para combinar colores
A la hora de combinar varios colores en un mismo espacio también se debe tener en cuenta lo siguiente:
- Los expertos en decoración recomiendan no usar más de tres colores en un mismo espacio, cuatro si uno es neutro.
- Los colores deben elegirse en función de la luz: antes de elegir los colores conviene estudiar la habitación y la luz natural que tiene. Si la habitación es muy oscura lo mejor elegir colores luminosos, mientras que si tiene mucha luz pueden usarse colores oscuros.
- Para seleccionar los muebles hay que observar el suelo: combinar muebles y paredes no es complicado, ya que estas últimas se pueden pintar en cualquier momento. Sin embargo, el suelo no se puede cambiar fácilmente, por lo que habrá que mirar su tono para elegir la tonalidad de los muebles. Si el suelo es oscuro, por ejemplo, se deberán elegir muebles de colores claros.
- Los colores pueden lograr efectos visuales: antes de elegir el color se debe pensar si se quiere conseguir algún efecto concreto: delimitar una zona, camuflar una columna, hacer que la habitación parezca más ancha o estrecha…
Comentarios
Una respuesta a «Cómo combinar los colores de la decoración»
[…] elegirse en base a criterios estéticos o de gusto personal. Si bien habitualmente se busca una buena combinación de los tonos de la habitación y un determinado estilo decorativo, el color también puede servir para crear […]