Hoy día hay una gran variedad de tipos de sofás, adaptados a todas las medidas, necesidades y familias. Para que puedas elegir el mejor para tu casa, te explicamos qué clases de sofás existen y en qué tienes que pensar antes de adquirirlo.
Tipos de sofás según su forma
- Sofá de una plaza o sillón: es aquel en el que sólo se puede sentar una persona. Es ideal para pequeñas estancias o para complementar otro sofá más grande.
- Sofá de dos o tres plazas: son los más tradicionales y preferidos por su versatilidad y posibilidad de combinación. Es muy común encontrar salones con dos sofás de varias plazas, ya que permiten que mucha gente se siente. Si no cabe más de uno, siempre existe la posibilidad de complementarlo con un sillón de una plaza.
- Chaise longue: es aquel que se compone de un sofá normal (habitualmente de tres plazas) al que se le añade un módulo en uno de los lados para poder estirar las piernas. Cuando se reúne mucha gente, el módulo de chaise longue puede servir para disponer de asientos extra.
- Sofá en L: alternativa a la colocación de dos sofás de varias plazas. Es ideal para grandes familias, ya que permite que lo usen cinco o seis personas sin dificultad. Este tipo de sofá también se suele utilizar para separar ambientes.
- Sofá rinconero: similar al sofá en L, la diferencia es que sus dos lados poseen la misma longitud. Su ángulo se acopla a cualquier rincón de la casa y permite albergar también a una gran cantidad de personas. Su forma sería la misma que se obtendría al colocar en ángulo recto dos sofás independientes de varias plazas, pero en este caso se aprovecha la unión de ambos lados para crear un nuevo asiento.
- Sofá modular: está compuesto por varias partes o secciones que pueden moverse y colocarse al gusto de cada uno. Es perfecto para aquellas habitaciones pequeñas cuya forma no encaja con las medidas estándar de sillones. Se le puede dar forma de U, separar las partes para tener asientos individuales o convertirlo en un sofá en L o rinconero.
- Sofá a medida: suelen recurrir a este tipo de sofás aquellas personas que no encuentran uno adecuado al espacio de su habitación.
Sofás con funcionalidades añadidas
- Sofá cama: es aquel que se puede abrir para conseguir una cama extra. Este tipo de sofás son muy útiles cuando no se tiene espacio para instalar un cuarto de invitados. Hoy día sus mecanismos han mejorado mucho y son fáciles de plegar y desplegar.
- Sofá con respaldo reclinable: permite adaptar la altura y la inclinación del sofá. Los mejores son los multiposición, ya que permiten elegir la inclinación más adecuada para cada uno. Muchos de ellos incluyen también un reposapiés.
- Sofá con almacenaje: son aquellos que tienen bajo sus asientos un arcón para guardar cosas. Lo mejor es almacenar dentro aquello que no se use diariamente: sábanas, mantas, ropa de otras temporadas, etc.
- Sofá masaje: incluye un mecanismos que permite reclinar el respaldo, levantar el reposapiés y activar funciones de masaje para la espalda o la circulación.
Cómo elegir un sofá
A la hora de elegir un sofá hay que tener en cuenta los siguientes factores:
- Espacio disponible: aunque se quiera un sofá muy grande en ocasiones no es posible por la medida o la forma de la habitación. Es importante medir con exactitud antes de elegir un modelo.
- Número de personas en casa: para grandes familias los mejores sofás son los que tienen forma de L o los rinconeros. Si por el contrario no viven muchas personas en la vivienda, los sofás de dos o tres plazas pueden ser más adecuados, especialmente si no hay mucho espacio.
- La decoración de la habitación: para elegir la tela, el color y la forma del sofá es importante saber qué estilo estamos buscando con la decoración de esa estancia.
- Color y estampado: los sofás neutros encajan mejor con cualquier decoración y cansan menos. Si se opta por un estampado, lo mejor es que sea discreto.
- Presupuesto destinado a la compra.
- Uso del sofá: la elección dependerá de para qué queramos el sofá y las necesidades que tengamos.
- Ergonomía: es importante probar los sofás en la tienda para ver si resultan ergonómicos y cómodos.
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