Aunque no lo parezca, la cama es el mueble que más horas usamos al día y por eso hay que elegir el colchón más adecuado, que proporcione un buen descanso y comodidad. No obstante, las camas ocupan mucho espacio en las habitaciones y por ello cada vez se diseñan más tipos que permiten adaptarlas a múltiples espacios (aunque sean pequeños) y aprovechar al máximo cada centímetro de su estructura.
Tamaño de las camas
Camas de matrimonio
El tamaño de las camas de matrimonio suele variar entre el 1,35 y 1,50 metros de ancho. Si la habitación no es muy grande, lo mejor es elegir el ancho de 1,35 pero, si el espacio lo permite, la opción de 1,50 es mucho más cómoda. Existen también algunas camas más grandes como la ‘queen size’ de 1,60 de ancho por 2 metros de largo y la ‘king size’ de 1,80 a 2 metros de ancho por dos de largo.
Camas individuales
A la hora de elegir la cama individual, se debe tener muy en cuenta la estatura de la persona que la va a ocupar, ya que lo ideal es que se pueda estirar completamente sin que se salgan los pies del colchón. Las camas individuales habitualmente son de 90 centímetros de ancho por dos metros de largo, aunque el ancho puede variar desde los 80 hasta los 105 centímetros.
En el caso de una habitación en la que convivan dos personas (especialmente niños) se puede comprar una litera para ahorrar espacio. Hoy día a las tradicionales literas –de madera y colocadas horizontalmente una sobre otra- se han unido otras con estructuras más novedosas, como aquellas que colocan una cama sobre el cabecero de la otra, de manera que formen un ángulo de 90 grados.
Camas con estructura especial
Para colocar una cama simplemente hace falta un somier (habitualmente de láminas) y unas patas que lo sostengan. A esto se puede añadir un cabecero (que no es más que un elemento decorativo). No obstante, esta versión básica cada vez está menos presente en los dormitorios, y ha dado paso a estructuras que permiten aprovechar al máximo el hueco ocupado por la cama.
Camas nido
Son un clásico ideal para dormitorios infantiles o juveniles. Bajo una cama de altura normal se coloca otra a modo de cajón que se extrae y se levanta con unas patas abatibles.
Camas abatibles
Son ideales para habitaciones muy estrechas, ya que durante el día se guardan en un mueble y dejan de ocupar superficie. Tienen el eje de apertura en el lado largo o ancho de la cama, por lo que pueden ser horizontales o verticales. Su apertura y bajada puede ser manual, semi-automática o automática. Están disponibles en una gran variedad de medidas, tanto para camas individuales como de matrimonio.
Los modelos de cama abatible son muy variados. Pueden tener la cama a nivel normal o en alto, venir de dos en dos para formar una litera e incluso tener un sofá o mesa extraíble que se puede sacar al guardar la cama.
Camas con almacenamiento
Si lo que nos preocupa en una habitación es la falta de espacio para almacenar ropa, podemos elegir alguna de las siguientes opciones:
- Camas a media altura: se coloca la cama sobre dos o tres escaños ocupados por cajones u otra cama. Por ejemplo, comenzando por el suelo, puede haber cajones, una cama nido (que se extrae y a la que no hay que sacarle las patas) y la cama principal. Si es una habitación individual con un armario muy pequeño, los dos escaños se pueden ocupar con cajones.
- Cama con canapé: es aquella en la que, mediante un juego de pistones, se puede levantar la base y el colchón para dejar al descubierto un arcón muy útil para guardar ropa, mantas… La base puede ser de láminas o tapizada.
Otras estructuras
- Camas flotantes: camas ancladas a la pared o colocadas sobre una estructura más pequeña que la cama, de manera que no se ve.
- Camas con dosel: ya que requieren de una estructura que soporte el dosel sólo son apropiadas para espacios amplios con techos altos.
- De estructura baja o estilo zen: son aquellas que están sobre una estructura que deja el colchón prácticamente a nivel del suelo.
- Cama articulada: es aquella que tiene un somier que puede adoptar diversas posiciones. Para este tipo de camas hace falta un colchón flexible. El cambio de posición se puede hacer manualmente o a través de un botón.
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