Tener plantas en casa siempre es muy importante. Aunque tengamos poco espacio, aunque vivamos en un apartamento o casa pequeña, siempre es posible encontrar un lugar idóneo para dar un toque verde al hogar. Es muy grande la diferencia entre tener y no tener plantas en casa, ya que los beneficios son muchísimos. Sumar rincones verdes a nuestro hogar queda precioso a nivel decoración y ayuda a mantener saludable el nivel de oxígeno y la calidad del aire. Y esto, además, es posible hacerlo durante todo el año, incluso en los meses de invierno.
No es indispensable tener un jardín grande, un patio o un balcón para tener un espacio verde en casa durante estos meses de frío. Sólo hay elegir el lugar adecuado y dedicarle el tiempo y cuidado que las plantas necesitan. Además, decorar con plantas está de moda, y en invierno también. Lejos de lo que pudiera parecer, existen variedades que florecen de manera abundante incluso con los climas más duros cuando se les proporcionan los cuidados adecuados y se les proteja bien de las heladas. Las ventajas de decorar con plantas son múltiples: dan oxígeno, depuran el ambiente, reducen el ruido, mejoran el ánimo, suman bienestar, aportan ricos aromas, etc. Además, no hay que olvidar que para mucha gente las plantas son incluso una compañía muy grata y un entretenido hobby que mejora su calidad de vida. Todos nuestros sentidos se potencian al estar en contacto con el verde.
Entre las plantas más apropiadas para estos meses invernales destacan algunas como la ciclamen, especie mediterránea cuyo crecimiento comienza en los meses otoño y con la llegada de la primavera se marchita y tiene distintas variedades dependiendo de su tamaño, o la hiedra, que es ideal para decorar fachadas y macetas con un precioso toque verde. Violas y pensamientos son plantas para el hogar en invierno, llenando de color los balcones. La prímula es otra planta de exterior de clima frío y suelen necesitar de 5 a 8ºC para su floración. La drácena también es muy apropiada para el exterior, sobre todo en un balcón situado al sur. Además, gracias al color púrpura oscuro de sus hojas, da un toque muy elegante a la composición en las jardineras, y también volumen. Para el interior son muy recomendables plantas como la ‘costilla de Adán’, violeta africana, ‘lengua de suegra’, anturio rojo, cactus, ficus benjamina, potus, peperomia, etc.
Cuidados
También en el interior de casa podemos contar con toques ‘verdes’ en estos meses de invierno. Es un buen periodo para cuidar las plantas, y es que a pesar de lo que pueda parecer, las plantas de interior necesitan más cuidados en invierno que en verano. Esto se debe a que, aunque las condiciones del interior de una vivienda aparentemente son mejores que el frío clima invernal, algunas acciones que llevamos a cabo de manera cotidiana durante los meses de frío pueden llegar a poner en entredicho la supervivencia de algunas plantas, incluso de las más resistentes.
Evidentemente, las plantas de exterior son las que más van a sufrir los meses de invierno a causa del frío. No obstante, aunque el exterior suela ser más frío que el interior, esto no siempre es así. Es fundamental asegurarse de que la temperatura media de la vivienda no descienda en exceso, especialmente por la noche, cuando la mayoría de las calefacciones están apagadas. Sin embargo, a pesar de que el frío es ahora el protagonista, el principal enemigo de las plantas de interior es la propia calefacción, ya que por un lado aumenta la temperatura en exceso y, por otro, reseca el ambiente. Para proteger las plantas de interior de la calefacción, lo mejor será bajar el termostato a una temperatura estándar que no supere los 21 ºC, siendo además bueno colocar algunos recipientes con agua en los radiadores, pulverizar agua en las hojas de las plantas una vez al día o colocar las plantas lejos de los radiadores, ya que el calor directo puede ser mortal para mucha de ellas. Aunque las plantas detienen su crecimiento durante el invierno y, por ende, el abono no tiene mucha lógica en este momento del año, si es bueno nutrir a la planta con fertilizantes específicos que ayuden al desarrollo de la raíz y la nutran sin entorpecer su periodo de descanso.
En invierno va a ser necesario controlar el riego igual que en verano e incluso con más cuidado. En verano lo más recomendable será ser generosos con el agua. Sin embargo, en el invierno, es importante que la tierra de las plantas esté húmeda, pero nunca en exceso, ya que podrá conllevar la aparición de hongos o la putrefacción de las raíces. Otro aspecto que habrá que tener en cuenta a la hora de cuidar las plantas de interior en invierno será que las horas de luz y la intensidad de la misma será menor. Por lo tanto, es muy importante que las plantas estén situadas cerca de las ventanas para que obtengan la mayor cantidad de luz posible.
En definitiva, los meses de frío tienen todos los ingredientes necesarios para estropear las plantas, incluso cuando están dentro de casa. Es una razón de peso para que prestemos especial atención a los cuidados de las plantas de interior en invierno, y los apliquemos de manera regular hasta la llegada de la primavera.
Durante estos meses invernales los días son más cortos, las temperaturas exteriores más bajas y las calefacciones palian el frío exterior calentando nuestros hogares y, simultáneamente, haciendo más seco el ambiente. Esto juega en contra de la salud de nuestra naturaleza y obliga a que tengamos en consideración algunos cuidados de las plantas de interior en invierno para hacer que, a pesar de todo ello, continúen estando sanas y hermosas. Más verde, nuestro hogar siempre gana.
