La entrada de diciembre en el calendario llega acompañada de los últimos suspiros del otoño. El último mes del año es capaz de despertar sentimientos tan opuestos que lo convierten en un mes destacable.
Un mes de celebración, fiesta, reencuentros familiares, que llega acompañado de comerciales navideños, turrón y buena comida, siendo uno de los meses más especiales del año. En lo que a decoración se refiere, es también una de los acontecimientos más icónicos, ya que la decoración navideña se extiende alrededor de todo el mundo.
Son numerosos los artículos decorativos de los que contamos para esta época. Siguiendo unas nociones básicas, la decoración navideña ofrece una gran libertad para adaptarla a nuestros gustos y necesidades. Los colores estrella de la navidad son los tonos rojos y verdes, con una gran presencia de elementos color plata y oro. Además de estos tonos cromáticos, destacan los detalles brillantes.
Las velas son una de las principales tendencias de la decoración navideña, ya que aportan a la estancia un toque cálido y acogedor. Los colores estrella de esta época son los tonos rojizos, dorados y plateados. Las velas aromatizadas además aportan una fragancia agradable en nuestro hogar.
Los centros de mesa siguen a la orden del día. Será porque alrededor de éstas suceden la mayoría de los eventos destacables de estas fechas. Combinando pequeños adornos podemos conseguir unos bonitos centros de mesa.
No podemos obviar el mítico árbol de navidad. Aunque muchos puedan pensar que se encuentra de capa caída, lo cierto es que su uso se ha visto modernizado gracias a las últimas tendencias. Ya no es necesario contar con un árbol, sino que hay numerosas alternativas para evocarlo. Un ejemplo que ha ganado numerosos adeptos es recrear un pino con luces decorativas en una pared.
Sin duda alguna, es la oportunidad perfecta para sacar vuestro lado más creativo. Animaros a ajustar la decoración navideña de vuestro hogar según los gustos personales, ya que no hay nada establecido. Hay personas que prefieren optar por unos mínimos detalles navideños, y otros que cargan su casa de luces y colores, por lo que todo dependerá de uno mismo.