Viajar es uno de los mayores placeres de la vida. Conocer lugares nuevos, pasear por calles desconocidas y prendarse de colores, olores o incluso idiomas diferentes, es una forma de crecer y rehacerse. Sumados a la comida, la arquitectura y el clima, el estilo y la decoración son algunos de los factores que mejor diferencian un lugar de otro. Hay países con estilos tan marcados que han creado tendencias propias (como el estilo nórdico), o ciudades tan dedicadas a la moda, la cultura y el diseño que sus calles están impregnadas de estilo, como Berlín o Barcelona.
Ya que se acercan las vacaciones de Semana Santa y algunos estaréis buscando dónde pasar unos días con encanto, vamos a hacer un repaso por 8 hoteles en Europa cuya decoración no os dejará indiferentes.
1 – UN ESPACIO CHIC EN BARCELONA
Empecemos por una de las ciudades más dedicadas a la decoración de nuestro país. Barcelona siempre ha sido un referente en el universo de la moda, por lo que diseñadores, directores de cine, modelos, actores, o simplemente personas de la alta burguesía europea, suelen pasearse por sus calles. Barcelona es conocida en las películas como “La ciudad donde cualquier cosa puede ocurrir”: aventuras, amores prohibidos, buen vino y gente interesante suelen ser los protagonistas. Hoy, sin embargo, el factor principal será la decoración.
Para estas personas que buscan “el sueño barcelonés”, el hotel Chic&Basic de Las Ramblas es la opción perfecta. Diseñado por el estudio LaGranja Desing, este hotel es un guiño a las películas españolas de los años 60 y 70 que hablaban de un incipiente turismo extranjero en la playa. Con un Seat 600 de color verde turquesa en la entrada y un mostrador hecho de maletas de piel antiguas, el hotel te permite viajar por los sillones tapizados con rombos y las vajillas marrones hasta volver a la época soñada por todo amante del vintage.
El Hotel dispone de 97 habitaciones (84 estancias dobles y 13 apartamentos) y cada una de ellas es diferente a la anterior, con nombres como “Habitación Guateque” o “Habitación Minifalda”. Así que decide qué dormitorio se adapta mejor a ti y pasa unos preciosos días chic en Barcelona desde 110 euros la noche.
2 – Diseño en la capital alemana
Q! es un hotel de diseño, con cinco estrellas, situado en la famosa calle Kurfürstendamm de Berlín. Con un estilo futurista, sobrio y elitista, es un hotel perfecto para los urbanitas y amantes de una ciudad tan moderna y alternativa como Berlín.
El hotel ha sido proyectado y decorado por el estudio de arquitectura Graft pensando en los turistas que quieren disfrutar de la más glamurosa vida nocturna de la ciudad, por lo que es el destino predilecto de numerosas celebridades internacionales.
En cuanto a la decoración, la recepción ya nos indica que se trata de un hotel con un estilo futurista y vanguardista; con un innovador espacio de curvas, pendientes, ángulos extraños y colores provocativos.
Sin duda, el hotel Q! no dejará a ninguna visita indiferente. Con sus 77 habitaciones (incluyendo cuatro estudios y un ático), y sumando su spa subterráneo con sauna finlandesa, baño de vapor y hasta una mini playa artificial con arena caliente, este lugar te ofrecerá una experiencia increíble desde 140 euros la noche.
3 – estilo, SOSTENIBILIDAD Y COMODIDAD EN HAMBURGO
El diseñador industrial y de interiores Karim Rashid, descrito por la revista TIMES como “el diseñador industrial más famoso de toda América”, es el responsable de la proyección, diseño y decoración del hotel Prizeotel de Hamburgo (Alemania).
Pensado para ser un espacio dedicado íntegramente al usuario, Rashid ha diseñado desde la moqueta hasta las sillas, creando este hotel con un estilo único e inconfundible.
Siete plantas y 216 habitaciones se llenan de coloridas y atractivas formas. A lo que se suman los restaurantes, lounge, buffet y las áreas de negocio, donde los colores rosas, azules, verdes y platas son los protagonistas.
Con un precio medio de 130 euros por habitación doble, este hotel puede ofrecerte algunas ofertas para disfrutar de sus estancias por 59 euros; así que si te gusta este diseñador, no lo dudes y pasea por un espacio que ha creado especialmente para tu descanso y comodidad.
4 – UN HOTEL EN ARMONÍA
La «armonía” entre los elementos, materiales, espacios y mobiliario es la característica principal del hotel Room Mate Aitana de Amsterdam, diseñado por el famoso interiorista español Tomás Alía.
Este enorme edificio de cristal está ubicado sobre la nueva isla artificial del río IJ; un lugar privilegiado en el centro de la ciudad. Nada más cruzar la entrada, el hotel nos cautiva con su cuidada estética y su juego de colores. Las zonas abiertas y bien iluminadas, el mobiliario cómodo y sencillo, y las formas orgánicas y escultóricas son los protagonistas de todas las estancias.
Lo único que tienen en común las 283 habitaciones del hotel son las increíbles vistas con ventanales del suelo al techo, porque por lo demás, cada una está decorada de forma diferente. El diseñador ha dejado muestra de su estilo más personal en estos espacios cargados de color, formas asimétricas e incluso habitaciones temáticas. Sin duda, este hotel tiene mucho que ofrecer a sus huéspedes. El único problema es que no es nada barato, porque te costará encontrar una habitación por menos de 300 euros la noche.
5 – Zurich desenfrenada
En el antiguo barrio industrial de Zürich West, se encuentra el hotel 25hours, un espacio moderno y colorista que no se parece en nada a lo que uno espera encontrar cuando piensa en los clásicos estereotipos suizos. En un barrio impregnado de clubes de jazz, librerías antiguas, locales de diseño y espacios culturales independientes, se ha ganado su espacio este hotel diseñado por el estudio de Alfredo Häberli con la ayuda de colaboradores como el estudio de arquitectura Aeberli Vega Zangui Architects o el experto en color Olivier Schmitt.
La cadena de hoteles alemana 25hours Hotel Company, tiene como lema que todos los hoteles sean completamente diferentes: “Conoces uno, no conoces ninguno”. Alfredo Häberli ha conseguido este requisito sin despeinarse, creando un hotel muy personal con un estilo particular y exótico.
Sus 125 habitaciones se dividen en tres clases: Silver, Gold y Platinum, cada una con una combinación de colores a juego con su clasificación. Todas ellas cuentan con un equipamiento diseñado y hecho a medida, lo que también ocurre en otros espacios del hotel como el lobby (que está presidido por una escalera impresionante) la biblioteca, el espacio de reuniones y un “KitchenClub” para ofrecer desde cursos de cocina hasta pequeñas fiestas particulares. Como guinda del pastel, en la última planta nos encontramos una sauna con vistas a la ciudad. Todo esto podemos disfrutarlo desde 150 euros la noche; aunque si queremos todos los detalles el precio no bajará de los 200 euros.
6 – Una experiencia colorida
Los que provengan del mundo del diseño gráfico o la ilustración, reconocen con facilidad el nombre Pantone porque identifica a la empresa creadora del sistema de identificación, comparación y comunicación del color para las artes gráficas que usa su mismo nombre.
Esta empresa ha consolidado su marca en el mundo del diseño y en cuestión de tiempo ha quedado claro que, cuando se habla de color, ellos son los que más saben. Con esta idea y el beneplácito de la empresa, los belgas Oliver Hannaert y Michel Penneman (arquitecto y decorador) han proyectado el Pantone Hotel, en el que el color es el protagonista de todo el espacio.
Situado a escasos metros de la Avenida Louise, en el centro de Bruselas (Bélgica), se encuentra este hotel boutique que pretende ofrecer una experiencia diferente. Para empezar, cuentan con 60 habitaciones de diferentes tonalidades, de estilo refinado y vanguardista, pensadas para que cada huésped elija la que más le conviene según su estado de ánimo. A fin de cuentas, este curioso hotel se caracterizan por proporcionar una atención personalizada al cliente; por lo que no serás uno más, sino que todo girara a tu alrededor. Para empezar, el hotel pone a tu disposición un equipo de psicólogos especializados y consultores de color. La meta es es lograr satisfacer todos tus gustos.
Y aunque este tipo de dedicación a tu bienestar suele salir caro, en esta ocasión Pantone Hotel nos sorprende con precios muy económicos y puedes encontrar tu habitación desde 59 euros la noche.
7 – Un homenaje al diseño y la ilustración
De nuevo la ciudad de Barcelona se convierte en nuestro destino predilecto al ofrecernos el Vincci Bit, un hotel diseñado por el estudio de arquitectura catalán Cirici & Basso y decorado por el interiorista chileno Jaime Beriestain.
Lo que Vincci Bit tiene de particular es que el decorador seleccionó a diez de los más prestigiosos y punteros ilustradores, diseñadores y especialistas en street art nacionales e internacionales para participar en el proyecto. La idea era llenar más de 2000 metros cuadrados de pasillos y espacios comunes con arte mural, y el resultado es un espectacular espacio de arte, modernidad y estilo.
A esto se le suma el peculiar estilo de Beriestain a la hora de decorar, por lo que en el hotel podremos encontrar piezas vintage de los años 60 y 70 (tanto reediciones como originales) y muebles diseñados por el propio decorador para este proyecto; además de elementos de marcas reconocidas en el mundo del diseño.
Si crees que una de sus 177 habitaciones lleva tu nombre, podrás encontrarla desde 180 euros la noche. Eso sí, te recomendamos que no desperdicies la oportunidad de pasearte por todas las plantas del hotel y disfrutar de las increíbles ilustraciones que llenan los pasillos.
8 – UN HOTEL ECOLÓGICO
La arquitectura y la decoración no tienen por qué ser invasivos en la naturaleza, de hecho, este hotel demuestra que se pueden complementar perfectamente para darnos una experiencia única y placentera. El hotel Friendhouse, ubicado a orillas del río Orel en Ucrania, es un ecohotel diseñado por el estudio de arquitectura de Yuriy Ryntov con la idea de utilizar solo materiales naturales e integrar el edificio a la perfección en el paisaje, de forma que se cree un mínimo impacto ambiental.
Antes de realizar el edificio, se hicieron estudios de la energía natural aprovechable en el terreno y el hotel acabó siendo una construcción tipo resort, en la que varias cabañas se instalan en medio de un paraje salvaje a 30 km de Dnepropertrovsk.
Los dormitorios, hechos de madera y arcilla, se mezclan con patios, terrazas, jardines y parques que suman, en total, más de mil quinientos metros cuadrados. El mobiliario se reduce al mínimo y los pilares son troncos de pino desnudos, evitando cualquier pieza o complemento que pueda ser innecesario. Se crea así un ambiente misterioso y envolvente que pretende ofrecer un espacio natural y único a sus huéspedes.
¡Así que ya sabes! La decoración y las vacaciones son una combinación perfecta. Elige la opción que más se adapta a tu estilo y pasa unos días, como mínimo, diferentes.
