Tras años ocultos bajo revestimientos de madera, los suelos hidráulicos vuelven a ver la luz. El tiempo ha terminado por confirmar que su presencia en las tendencias decorativas actuales no es pasajera.
Los suelos hidráulicos surgieron en el sur de Francia, y fueron característicos de las casa de finales del siglo XIX, cubriendo los suelos de las clases medios burguesas que no podían permitirse recubrir sus suelos con los caros y fríos mármoles, y querían imitar las grandes alfombras señoriales de las familias más adineradas.
Como sabemos, las nuevas tendencias más modernistas, recuperan lo antiguo, y es que lo moderno hoy en día, es rescatar lo antiguo, lo vintage.
Son baldosas decorativas de cemento pigmentado fabricadas de una forma artesanal, una a una.
Las baldosas hidráulicas son muy versátiles, ya que tiene una gran facilidad para ser combinadas tanto con otros estilos de suelo, como con otros materiales, muebles o estilos de decoración, y pueden ser colocados tanto en suelos, paredes o mobiliario.
En cuanto al estilo de los suelos, se puede optar por un modelo más tradicional, o apostar por nuevos modelos más acordes a las decoraciones actuales.
Hoy en día, encontramos varias alternativas al suelo hidráulico, como imitaciones de Gres, que conservan la esencia de los suelos hidráulicos tradicionales, pero con las ventajas como una mayor facilidad de manipulación, limpieza y mantenimiento.
Los azulejos de imitación hidráulicos, junto con el parquet cerámico,son las grandes tendencias clave en cuanto a azulejos y pavimentos del año 2016-17